Paseo por los matorrales [Cerrado]

Después de perfeccionar mi "pase de salida", ya muy cansado de trabajar, me fui a dar un pequeño paseo por los jardines, avistando un árbol me dirijo a este, no se veía nada nuevo, los mismos presos perezosos que se escondían para no hacer nada, no les di ni una palabra y me senté frente a dicho árbol baje mis mangas mirando las marcas de mis bazos que aun no cicatrizaban volví a subir mis mangas y me puse a respirar, hacia rato que no salia de mi celda y dije en un suspiro:

Valla... No me sentía tan tranquilo desde hace rato, algún día, seré imparable y me echare la puerta por delante... Y saldré de aquí

Cerré mis ojos por unos momentos sintiendo el fresco, ese dia estaba nublado y no se sentía el sol, las brisas frescas eran lo mejor, solo me quedaba en mi lugar respirando tranquilamente...

Me encontraba reposando debajo de un árbol, el día ameritaba estar fuera del Hospital… lejos de los típicos quejosos, que solo buscan problemas, o de los vigilantes pervertidos que te tocan y tienes que dejarte. Ya estaba bastante cansada de eso, y apenas llevaba un año de mi larga condena.

Tome mi cámara fotográfica y comencé a tomar a los pajarillos que se asomaban por el jardín, ellos siempre tan libres. La figura de un hombre se metió en mi enfoque ahuyentando a las aves, hice una mueca de desapruebo pero después vi que era Joshua, tiempo después apareció una mujer en escena, Saeko.

- Hey Josh! –lo llame desde donde estaba ignorando a la chica de cabellera morada- Ven aquí –dije tranquila con la cámara en la mano.

Tenia intenciones de saludarlo, hacia mucho que no hablaba con el, pero bueno, éramos de los que mas antigüedad teníamos en el Hospital. Ya me había acostumbrado a sus dos personalidades, y debería de admitir… la segunda me daba escalofríos. Con respecto a Saeko, supongo la trataba bien, no me gustaba ser descortés con nadie, pero ella no se dejaba tratar lo suficiente por lo que decidí no imponerla a que se llevara conmigo y dejar que sola viniera si quería una amista o relación de compañeras.

Había oído la voz de Kasia, era lo que podía llamarse mi única amiga, sabia de mi otra personalidad, prácticamente era la única con la que había hablado en mi estancia, la salude con la mano y me fije primero en ella, y le pregunte con algo de amabilidad:

-Es algo curioso verte por aqui, lo sabes?...Que deseas?

Finalmente le conteste a la chica "Realista" si bien lo normal seria tratar de sobrevivir no podía esperar tanto tiempo por un impulso, le dije en tono serio sin siquiera ver su cara:

Srta, hay que ser un poco optimista para no terminar de enloquecer aquí, debería intentarlo de vez en cuando

Cruzado de brazos y con mis ojos cerrados, aunque me alegraba estar cerca de Kasia, no la veía desde hace mucho y quería hablarle de los resultados del arduo trabajo cuando estuviéramos en privado...

"Es algo curioso verte por aqui, lo sabes?...Que deseas?"

Sonreí ante lo dicho, la verdad es que si era curioso que estuviera fuera del hospital y no dentro la biblioteca.

- Solo quería saludarte Josh –dije tranquila mientras miraba como le contestaba a Saeko, en parte tenia razón, si el optimismo era todo lo que nos quedaba ya que la esperanza era nula.

Hice señas a Joshua para que tomara asiento, pero el sonido de una rama caer me erizo la piel, por segundos pensé que había sido una bala perdida de las del director. Mi corazón se tranquilizo de apoco mientras veía como Saeko se acomodaba al lado de nosotros, sonreí ante la acción ya un poco mas tranquila y respondí a su pregunta.

- Vendrá en tres días supongo, ya sabes que necesitan de su día íntimo especial con el director –reí ante eso, ya que era verdad.

De antemano sabíamos que entra las razones por las cuales ella venia era solo a visitar a su amado, lo de cuidar si estábamos bien era mas una fachada que otra cosa.

Mi postura de calma fue detenida por un estruendo espantoso, di un paso atrás por impulso y dándome cuenta de la razón del sonido volví a mi lugar y mire atento a Kasia escuchando sus palabras, no le importaba mucho que la presidenta faltara el tiempo que fuese, aunque el hambre podría causar cosas desafortunadas a largo plazo, en fin volví a cruzarme de brazos y dije algo serio:

Bien... Kasia crees que terminen encerrando a la mitad de nosotros todo el día otra vez hasta que se valla?

Dije con tono tranquilo, ya no tenia nada importante que hacer así que no me importaba que me sacaran de mi celda por la fuerza...Otra vez...

Escuche atenta lo que los dos decían mirándoles a los ojos por cortesía, después de analizar las preguntas respondí calmadamente.

- Si Josh, posiblemente los metan otra vez, deberías controlarte solo ese día –tome un respiro para después mirar a Saeko con una sonrisa sincera- valla que eres valiente -empecé pero después mi rostro se torno inexpresivo- perdona pero yo no puedo ayudarte a arruinar su diversión… tengo a bastantes pequeños (se refiere a los internos de menor edad) que necesitan de mi ayuda… no puedo darme esos lujos-.

Me encoja de hombros ya que era verdad, no es que no me gustara la idea de arruinarlas su paraíso cuando nosotros vivíamos un inferno, pero tenia sus prioridades en orden, por un lado cuidar a sus protegidos… y por otro… sobrevivir. Exacto, ser de esa minoría casi nula de los que sobreviven a cumplir su castigo. Después unos segundos Saeko lanzo otra pregunta al aire, la mire algo inquieta por lo que respondí rápido.

- No… es algo que sucede y ya –termine de decir mientras guardaba mi cámara- Además… -susurre mientras miraba a los demás internos- Le temo más a las personas de este lugar que a la misma muerte.

Era la verdad, todos los internos dentro sufrían de trastornos psicológicos muy específicos, daba miedo estar entre tanto enfermo mental. Aunque yo no era una santa, de igual forma no es bonito estar en una plática de caníbales.

- Y Bien… -suspire mirándolos- ¿Quieren hacer algo?

Escuchaba con curiosidad lo que me decía Kasia el comentario era valido, ya había sido encerrado una cuantas veces allí, en medio de un bostezo de respondí primeramente:

Eso no fue mi culpa, eso díselo al otro...

Mire atentamente a Saeko mientras hablaba, era ciertamente un estupidez tratar de interferir en eso, después de oír su siguiente pregunta le conteste con una sonrisa de lado denotando la gracia que me hacia la pregunta y diciendo calmadamente:

No tiene sentido hacerlo, solo llega y se va como le da en gana, lo mas inteligente es reírte de ella ya que nada puedes hacer para evitarla...

Volví a mirar a Kasia después de su pregunta y respondiéndole con sinceridad y una sonrisa tranquila:

Yo solo venia a descansar un poco la mente, has lo que quieras que igual no tengo nada que hacer

En lo que esperaba una respuesta de ambos, mi mirada se poso en dos nuevos internos, al parecer se querían hacer los interesantes, rudos y fuertes frente a todos. Pobres estúpidos… no sabían que las apariencias engañan demasiado en un lugar como este, y que no era necesario parecer fuerte… incluso la fuerza no lo era todo, es mas la inteligencia. Al momento de escuchar que ninguno tenía una idea clara, me encoja de hombros buscando en mi mente algo “divertido” que hacer. Los internos que hacia unos momentos estaban peleando se habían pasado de su pelea a otros con unos internos que solo querían detenerlos, me levante del suelo furiosa ya que conocía a los chicos que golpearon.

- Son nuevos… démosle su novatada… después de todo los vigilantes están en su cambio de turno a esta hora… -tome la rama que había caído hace unos momentos, era lo suficientemente gruesa y rasposa como para proporcionar un buen golpe.

La coloque tras mi espalda mientras me acerque a ellos delicadamente, los salude amablemente con una sonrisa un tanto falsa, los hombres que aparentaban una edad de 17 – 20 años, el mas joven era moreno y algo corto de estatura, mientras que él mas “adulto” era de test mas pálida y con barba. Se acercaron a mí con lujo de tocarme, tuve que aguantarme sus malos intentos de ligue. Espere paciente a que los chicos que habían golpeado escaparan, ya que se habían ido tome con fuerza la rama y golpee en la cabeza al hombre de barba.

- No deberías golpear desconocidos… -susurre tranquila.

El menor se quedo sorprendido por unos segundos, ya que su amigo estaba tumbado en el suelo, me tomo de la playera como si nada y amenazo en un idioma que no conocía. Patalee un poco esperando a que me soltara pero no lo hacia, suspire ya que la rama estaba rota por el golpe que había proporcionado hacia ya minutos y no me serviría.

Mire un poco atento las acciones de Kasia, era algo entretenido, una vez vi que había noqueado al mayor de los dos me acerque a verlos con interés, el mayor estaba como... Una muñeca de trapo en el suelo que no se movía ni un milímetro, vi como el menor se agarraba de la playera de Kasia como si fuera su salvación, observe al rededor por si habían guardias descubriendo que no habían llegado y desde mi lugar pensé por un instante:

Al diablo, si no están aquí no veo por que no esforzarme un poco.

Camine hacia el preso que tenia agarrada a Kasia de la playera y lo agarre del cuello el cual por la sorpresa soltó la playera, yo patee su estomago tirándolo en el suelo boca arriba y pisotee su estomago y aplique mucha presión hasta que quedara inconsciente por el dolor, mire de nuevo hasta la institución mirando que aun no salían guardias y con un suspiro dije:

No puedo creer que aun no noten lo que pasa, a este paso ya habría cinco muertos si él (Refiriéndose a su otra personalidad) estuviera aquí...

Por si las dudas me aleje de los presos mirando de reojo al que había atacado, me volví a sentar en el árbol esperando cuando llegarían lo dichosos guardias para ver como reaccionarían y que medidas tomarían...

Caí sentada lo cual me dio un leve dolor, el cual fue soportable por lo que me levante rápido mientras miraba como Joshua acaba con el segundo hombre de un golpe en el estomago. Mire a los dos novatos para después divisar que los dos traían cigarrillos y un encendedor en forma de corteza de árbol, aproveche su estado actual para quitárselos y guardarlos dentro de mis pantalones.

- Gracias por su amable cooperación… -musite de forma tranquila y a la vez sínica mientras me regresaba a sentarme debajo del árbol, no sin antes responderle a Saeko- Si, no me hicieron mucho daño… cierto hombre me hace más daño otras veces… -susurre mientras miraba de reojo a Joshua.

Los vigilantes comenzaron a llegar esperando una explicación, por mi parte actué como si nada hubiera pasado. Los demás internos no querían delatarnos, ya que sabían que les iría mal si lo hacían, aun así éramos los mas cercanos a ellos, por lo que decidí hablar antes de que nos llevaran.

- Se pelearon entre ellos… ya saben como son los novatos, siempre quieren verse superiores… -dije tranquila esperando me creyeran.

Al final, los vigilantes optaron por dejarlo así, se llevaron a los dos revoltosos que apenas iban despertando del trauma, uno de ellos, el mayor… se quedo mirando a nuestro lado con desprecio y aires de venganza. << ¡Va! Toda su fuerza se ira en la sala de torturas… que importa >> dije sin sentir remordimiento. Espere lo suficiente a que ellos se fueran y saque las cajetillas de cigarro, tome uno y lo encendí con el mismo encendedor que les había quitado.

- Pocas veces se puede disfrutar de esto… so… ¿quieren? –ofrecí mientras fumaba con tranquilidad-.

Miraba lo que Kasia hacia con algo de interés, no era de especial importancia asi que deje de verla por un momento para al volver a verla notar que me miraba de reojo, era un poco molesto pero lo ignore y dije con tono serio hacia mi mismo:

Si se hacían los chulos debieron dar mas pelea... No creo que valiera la pena levantarme en primer lugar

Mire como llegaban por fin los guardias a llevarse a los responsables del alboroto, los mire con algo de interés mientras veía como se llevaban a los dos presos que yacían en el suelo, una preocupación menos, por lo general todos pierden la valentía al llegar a la sala de torturas, veía a Kasia volver al árbol con lo que parecían unos cigarrillos, ante su propuesta niego con la cabeza diciendo:

Gracias pero no tengo ganas, dáselo a ella...

Señalando levemente con la cabeza a Saeko.

Después de las primeras bocanadas de aire toxico, la expresión de Kasia era casi inexpresiva, al parecer se había relajado lo suficiente después de mucho tiempo no lo hacia. Reposo la mano con la que tenía el cigarrillo cerca de su mejilla con cuidado de no quemarse y respondió tranquila a lo de Saeko.

- Veras es algo tan común que no es interesante… -medio sonrió mirando a Saeko- yo estoy aquí por negligencia, malas compañías y drogas… -con eso resumió demasiado toda su historia- supongo que es todo lo que tendrías que saber, ya que mi historia no están buena como la que cuentan de ustedes dos… -termino de decir arqueando una ceja, para despues darle otra bocanada al cigarro.

Era de suponerse que los mas afamados y antiguos internos del lugar tuvieran rumores de asesinatos a grandes escalas, robos asombrosos, etc. y aunque pudiera ser cierto por parte de Joshua y Saeko, para Kasia era totalmente ajeno el terreno de ser un maleante, ella fue culpada por falta de pruebas y por estar en un mal lugar (claro lo de las drogas era totalmente verídico pero eso no justificaba su estancia ahí o al menos no del todo).

Spoiler:

Olía el cigarrillo mientras hablaban, no tenia nada en contra de eso pero si los guardias se pasaban por aquí y lo olían también estaría en un problema, espere a que Kasia terminara de hablar y algo curioso por la ultima parte: "ya que mi historia no están buena como la que cuentan de ustedes dos…" era molesto que sacara el tema -Y con todo lo que trabaje para que no se supiera...- En un suspiro le respondí a Saeko con un tono un poco serio:

Un amigo me visito después de un tiempo, me metió en un problema grande, trato de huir y lo estoy pagando yo... Es mas o menos por lo que estoy aquí.

Bostece viendo lo calmado que se había puesto todo de repente y me puse a mirar todo desde mi lugar tranquilamente.

Su cigarro se fue consumiendo rápidamente, al parecer el hecho de que no hubiera fumado desde hace varios días le afecto. Kasia miro con poco interés como Saeko se iba dejando una excusa justificada. Supuso que tendría una cita con algunos internos, para golpearlos o que sabía ella.
- Valla esto se acaba rapi… do –le costó trabajo terminar ya que los vigilantes llegaron y la tomaron por los brazos.
Llegaron furiosos, tomaron la caja de cigarros que era visible y la restregaron en su cara, decían cosas como “¿Creías que no nos daríamos cuenta?” y “no somos estúpidos”. Jalonearon su cabello y la llevaron a rastras a la sala de torturas. Kasia no opuso resistencia, por lo que se despidió de Josh con una media sonrisa.

Al ver como se llevaban a Kasia de seguro a la sala de torturas por los cigarrillos decidí no hacer nada para no empeorar la situación, tome algunos cigarrillos esparcidos por el suelo por los vigilantes para cuando volviera y los escondí en mi ropa para cuando la volviera a ver, había sido una recreación muy buena, me levante de mi lugar y me dirijo a la institución,pensando:

Valla que hoy han pasado cosas interesantes... A ver que mas puede sorprenderme hoy.

abrí a puerta y me puse a seguir mi paseo mientras tuviera tiempo y seguí mi camino por los pasillos de aquel horrible lugar.